Una variedad de situaciones puede provocar ansiedad en tu perro. Aprende a reconocer los signos de ansiedad en los perros y qué puedes hacer para ayudarles a superar su estrés.
Cuanto más tiempo pasamos con nuestros perros, más sentimos que tenemos un instinto natural para saber cómo se sienten en cada momento. Son geniales expresando cuando están felices, hambrientos, cansados o simplemente quieren que les rasques la barriguita, pero, lamentablemente, la ansiedad es mucho más difícil de notar en ellos y se te perdonará si interpretas erróneamente estos síntomas como si tu perro estuviese maleducado.
Cuanto más sepas sobre lo que provoca ansiedad en tu perro, mejor podrás notar los signos y ayudarle.
¿Qué causa la ansiedad en los perros?
Sonidos, situaciones y entornos concretos pueden provocar ansiedad y estrés en tu perro. Estas situaciones incluyen:
- Ruidos fuertes (tormentas, fuegos artificiales, etc.)
- Cambios en la rutina
- Visitas inesperadas
- Estar solo en casa
- Viajes en coche
Para algunos perros, la causa es menos obvia y puede estar relacionada con su temperamento, genética y experiencias negativas previas.
¿Cómo saber si tu perro está ansioso o estresado?
Interpretar correctamente el lenguaje corporal de tu perro es muy importante. Estas son las primeras reacciones que tu perro mostrará cuando se enfrente a una experiencia temerosa:
- Lamerse los labios
- Bostezar
- Orejas hacia atrás
- Esquinas de la boca hacia atrás mostrando los dientes – puede parecer que está «sonriendo»
- Hipervigilancia – escaneando constantemente el entorno
- Cola entre las patas
- Pelo en su espalda erguido
- Agazaparse
- Blancos de los ojos visibles
- Jadeo sin razón aparente
También es importante entender los signos que indican que tu perro está experimentando ansiedad para ayudarle a recuperar su felicidad. Algunos de los principales síntomas de ansiedad incluyen:
- Temblor
- Quejidos
- Esconderse detrás de tus piernas o los muebles
- Volverse o mirar hacia otro lado
- Estornudar
- Jadeo y babear
- Micción o defecación repentina
- Comportamiento destructivo
- Agresión defensiva – gruñidos, mordiscos, ladridos
- Inquietud y caminar de un lado a otro – a veces parece que están «emocionados»
Cómo ayudar a un perro ansioso
Socializa a tu cachorro
El período de socialización crítica de un perro es cuando tiene entre 4 y 16 semanas. Durante este periodo, el cerebro de un perro aprende activamente cómo aceptar e interactuar con otros miembros de su grupo social (perros, personas y otros animales) y con el entorno.
Para que un cachorro se convierta en un adulto amistoso, seguro y feliz, es fundamental que sea manejado regularmente y expuesto a situaciones nuevas de manera no amenazante.
Investigaciones han demostrado que los cachorros que no son expuestos a otros perros y personas durante este período crítico son más propensos a desarrollar comportamientos temerosos y agresivos, así como problemas de comportamiento en sus vidas futuras. Por lo tanto, es muy importante socializar a tu cachorro antes de que cumpla 16 semanas.
Evita situaciones estresantes y desensibilízalo
La mejor manera de ayudar a tu perro con ansiedad es identificar los signos y desencadenantes de su ansiedad y mantenerlo alejado de estas situaciones. Asegúrate de tranquilizar a tu perro y nunca castigues sus reacciones temerosas.
Si sabes que un evento estresante podría ocurrir en el futuro, tómate el tiempo para desensibilizar a tu perro ante sus desencadenantes en entornos calmados y controlados. Si se hace correctamente, tu perro puede aprender que las cosas que le generan estrés no son tan aterradoras. Busca el consejo de veterinarios especialistas en comportamiento y entrenadores de conducta certificados que utilicen métodos de entrenamiento positivos y evita los desencadenantes de tu perro hasta que su ansiedad haya sido manejada.
Proporciona un entorno hogareño estable que satisfaga las necesidades de tu perro
Los entornos impredecibles pueden contribuir a la ansiedad de tu perro. Tu mascota quiere poder relajarse en casa sin preocuparse por qué va a cambiar, si está segura para dejarse llevar y dormir, o si puede encontrar comida y agua. Prosperan en una rutina consistente.
Para ayudar a tu perro a sentirse cómodo en casa, asegúrate de que:
- Siempre tenga acceso a agua
- Se le alimente de manera regular
- Tenga acceso a un espacio seguro y relajante al que pueda retirarse (por ejemplo, una jaula o un «nido» en un armario con una cama cómoda y juguetes que le gusten)
- Pueda ir a su área de baño cuando lo necesite
- Tenga múltiples lugares donde pueda elegir relajarse
- Reciba paseos regulares
- Reciba amor y atención
Proporciona oportunidades para la estimulación mental
El ejercicio mental es tan importante para tu perro como el ejercicio físico. Estimular su mente a través de la enriquecimiento ambiental ayuda a prevenir el aburrimiento y a mantenerlo entretenido, reduciendo el estrés leve y mejorando su bienestar emocional.
Algunas actividades de enriquecimiento simples que puedes hacer incluyen:
- Juegos de olfato
- Puzzles para mascotas
- Juguetes interactivos
- Entrenamiento y trucos nuevos
Utiliza feromonas sintéticas, golosinas y suplementos calmantes
Una de las formas más útiles de tranquilizar o apaciguar a tu perro ansioso es utilizar una feromona sintética como Adaptil. Adaptil es una copia sintética de la feromona natural que libera la madre de un cachorro durante la lactancia. Esta feromona solo la detectan los perros, así que no notarás ningún cambio, pero tu mejor amigo se sentirá seguro y protegido y experimentará menos miedo y estrés. Adaptil está disponible como difusor, que es genial para usar en casa, y como collar o spray.
Alternativamente, hay suplementos calmantes que puedes añadir a la comida de tu perro o golosinas tranquilizantes que pueden ayudar a reducir la ansiedad de tu perro en pocas horas. Asegúrate de leer las instrucciones de estos productos, ya que muchos son más efectivos si se administran antes de que comience un evento estresante.
Visita al veterinario para una evaluación de salud y comportamiento
Si sospechas que tu compañero canino puede estar sufriendo de ansiedad, siempre busca el consejo de tu veterinario. Especialmente cuando los síntomas aparecen rápidamente en un corto período de tiempo, ya que podrían estar relacionados con problemas médicos o dolor que aumentan la irritabilidad. Tu veterinario de confianza podrá recomendarte que trabajes con tu perro con un etólogo o un educador canino en función de su estado de ansiedad.
Tu veterinario podrá diagnosticar cualquier problema de salud potencial y también crear un plan de tratamiento adaptado para ayudar a la ansiedad de tu perro.
Para ayudar a tu perro a superar su ansiedad, explora distintas alternativas gama de tratamientos para el estrés y la ansiedad en perros para encontrar herramientas productos que le ayuden a volver a ser feliz y mover la cola de forma tranquila y sosegada.
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Clara González, periodista especializada en el mundo animal, comparte su pasión y conocimiento en Kibupet.com. Con más de diez años escribiendo sobre el cuidado y bienestar animal, Clara ofrece consejos prácticos y guías útiles para tutores de todo tipo de mascotas. Vive en España con su gato Leo y su perro Max, siempre buscando inspirar a otros a cuidar mejor de sus queridos compañeros.